domingo, 19 de mayo de 2013

ABRIL 2013
 
 
 
 
 
 









Nueva temporada (2013)
 
 
 
 
 
































Abril  2013.

 
Comenzamos la nueva temporada de buceo y como siempre estamos deseando entrar al agua.  Compartimos ideas, deseos, sentimientos…cosa que nos une cada vez más.

La primera buceada la hemos realizado por la zona de poniente ya que el levante azotaba el Mediterráneo con unos 20 km/h. Cuando se da esta situación la zona de poniente está calmada y el océano parece un plato. Todos estamos sedientos de mar, hace ya varios meses que no tocamos el agua por las condiciones meteorológicas que se han dado. Es cierto que el submarinismo se puede practicar todo el año si cuentas con un equipo adecuado a temperaturas más frías. Pero se ve limitado cuando hay temporal. Comenzamos a preparar el equipo y nos vestimos. Cada persona siempre trabaja ayudando al otro. Hacemos el control pre-inmersión revisando todo antes de entrar al agua: Chaleco, plomos, tiras, aire y ok final.  Tras varios meses entramos al agua y volvemos a sentir todo aquello por lo cual volvemos de nuevo.

Al  entrar en el agua el cuerpo se relaja, deja de sentir peso y el calor que tenías desaparece y el agua que entra en el neopreno te refresca. Comenzamos a nadar con nuestro tubo de snorkel hasta la zona donde vamos a realizar el descenso. Llegados al punto realizamos los cinco puntos del descenso: hacemos la señal de que estamos preparados para descender; nos orientamos en superficie tomando puntos de referencia; cambiamos el tubo por el regulador; controlamos el tiempo y deshinchamos el chaleco lentamente. Conforme comenzamos a hundirnos vamos compensando los oídos. Al llegar abajo establecemos flotabilidad neutra y comenzamos a vivir una sensación difícil de describir con palabras.

Es cierto que durante las primeras inmersiones estás más asustado, aún no controlas muy bien tu equipo y este desconcierto no te hace disfrutar al máximo de tus inmersiones. Pero no te preocupes tu compañero estará ahí para ayudarte y sólo es cuestión de tiempo el controlarlo. Será a partir de ahí cuando tus inmersiones serán más tranquilas y te permitirán detenerte y ver lo que te rodea.

Comienzas a sentir la flotabilidad como algo divertido y agradable. Esa sensación de ingravidez convierte a tu cuerpo en un objeto que se mantiene en suspensión en el agua. Todo se debe al Principio de Arquímedes por el cual la situación en la que las fuerzas son equivalentes (la masa del buzo es igual a la masa del agua que desplaza)  la flotabilidad se considera neutra.

 Y claro si a esta sensación corporal le añades un mundo desconocido, silencioso y lleno de vida. Todo se multiplica.

La vida acuática es inmensa no sólo en fauna sino también en flora. Las plantas dominan el fondo marino con sus colores. Rosas, rojos, lilas, verdes, naranjas…todo un mundo de color delante de tus ojos.
                                                               coral estrellado.

Avanzamos hacia una zona rocosa. Si miras hacia arriba ves un acantilado bajo el agua. A veces nos situamos por debajo de ciertas rocas que nos cubren como si de un paraguas se tratase. Rocas cubiertas de coral estrellado, toda una pared naranja con algún que otro nudibranquio paseándose entre ellas. Cuando llegamos al sendero de los Borriquetes comenzaron a llegar algunas chovas de buen tamaño…comenzaron a llegar de todas las direcciones…y de pronto nos vimos envueltos en una cacería. Bancos de peces de distintos tamaños nadaban a nuestro alrededor a una velocidad de vértigo. Cientos de chovas cazaban sin contemplaciones a todo pez que se pusiera por delante. Todos nos quedamos atónitos al ver semejante espectáculo. Recuerdo el color plateado brillante de las chovas, es un pez precioso. Durante el tiempo que duró todos compartíamos con nuestros gestos el asombro por la situación que estábamos viviendo. Pasados unos minutos empezaron a desaparecer y de pronto casi solos porque allí estaban una morena enorme y dos mantas que aprovecharon el momento para alimentarse.

La morena era completamente negra y una linea amarilla le atravesaba todo el cuerpo. Su cara mostraba agresividad y su boca abierta me mantenía alejada de ella. Las mantas eran bastante grandes podrían medir unos 50 cm de ancho. Me recreé al mirarla como nadaba por debajo de mí, maravillosamente elegante en sus movimientos. Comenzamos a atravesar aquellas dos grandes rocas bajo el agua y sentimos que las corrientes eran más fuertes en aquella zona. Llegados a este momento lo mejor es agarrarse a alguna roca y aprovechar el impulso de la corriente para avanzar. Sin dificultad salimos de allí y reemprendimos la vuelta atrás. Seguimos disfrutando del momento como si el camino de vuelta no lo hubiésemos visto nunca. Es lo mágico del buceo. Mil veces visto, mil veces distinto. Si es verdad que hay peces muy territoriales pero la mayoría se mueven por doquier. Al salir, las caras de todos mostraban felicidad y comenzamos a relatar nuestro asombro por lo vivido durante la inmersión.

 

Desde hace bastante tiempo rondaba por nuestras mentes crear un club de submarinismo en Arcos con el propósito de fomentar  este deporte y el conocimiento de la fauna y flora que predomina en nuestro territorio. A su vez pretendemos ser  partícipes de una lucha a favor del medio ambiente y así, de alguna manera, poner  nuestro granito de arena en la limpieza de los fondos marinos.

 

Pues ya está hecho. Hemos constituido el “Club Buceo Poseidón Arcos”  y todos los miembros que actualmente lo componemos nos sentimos muy felices de transmitir nuestras vivencias. Disfrutamos cuando vemos que cada vez más gente se está interesando en conocer el mar y disfrutar de la sensación que te produce respirar bajo el agua , la sensación de flotabilidad o los sonidos e imágenes únicas que descubrirás. De ahí, que os invitemos a conocer nuestro club, a  que forméis parte de él, sin ánimo de lucro, únicamente dispuesto a informaros y a ofreceros la posibilidad de conocer este mundo tan cercano y desconocido a la vez. Se dice que el hombre conoce mejor la Luna que el fondo de los mares…pero sólo es cuestión de tiempo cambiar ese dicho.

 

Si te gusta la naturaleza has llegado al sitio indicado. Ningún otro entorno ofrece más abundancia, diversidad, dinamismo y cantidad de vida. Además puede ofrecerte adrenalina e intensidad o serenidad y paz. Harás nuevos amigos con los que compartir la experiencia. Por lo tanto nos atrevemos a decirte que a partir de la primera inmersión tu vida ya no será igual que antes.